A la hora de preparar los entrenamientos, hay que prestar una atención especial a la prevención de lesiones. En este artículo verás los consejos necesarios para que sepas cómo evitar lesiones entrenando.
Consejos para evitar lesiones en los entrenamientos
1- Hacer un calentamiento previo
Las posibilidades de lesión se reducen en gran medida cuando se realiza un buen calentamiento antes del entrenamiento.
Una secuencia correcta de calentamiento incluirá los siguientes elementos: calentar la movilidad articular general, practicar un un ejercicio metabólico cardio (aunque el deporte a practicar no sea de tipo cardio), realización de ejercicios básicos a un nivel reducido de repeticiones y tiempo, y ejercicios específicos del deporte a practicar durante poco tiempo y a bajas repeticiones.
2- Conocimiento del deporte a practicar
Otro aspecto para saber cómo evitar lesiones entrenando es el conocimiento en detalle del deporte que vamos a practicar.
Hay que conocer qué músculos se consideran secundarios o complementarios. Estos músculos deben ser trabajados para no ocasionar sobrecargas en los músculos principales del entrenamiento.
También debemos tener en cuenta las articulaciones que hay que reforzar con ejercicios específicos.
Por último, no hay que olvidar los antagonistas de cada movimiento. De esta manera, se podrán evitar las posibles descompensaciones que pueden dar lugar a lesiones.
3- Cuidar la alimentación
Para que todos los componentes del sistema locomotor y nervioso funcionen a un rendimiento óptimo, es importante llevar a cabo una alimentación completa. Si nuestro organismo dispone de todos los nutrientes, minerales y vitaminas, no habrá deficiencias. Se evitarán las lesiones que se generan por un déficit de nutrientes o energía.
4- Grado de concentración adecuado
El grado de concentración durante los entrenamientos se tiene que mantener en un nivel alto. Si estamos pensando en otras cosas mientras entrenamos, nuestro sistema nervioso central no será capaz de coordinar bien las acciones del aparato locomotor. Los ejercicios no se realizarán de la manera correcta y se ejecutarán a intensidades más altas en momentos en los que el cuerpo no esté preparado.
5- Estiramientos posteriores
Después de cada entrenamiento es fundamental estirar de forma correcta los músculos que han trabajado. Se evitan sobrecargas y contracturas. Además, el cuerpo se relaja y al día siguiente podremos entrenar mejor.
6- Autocontrol
En algunas ocasiones, un exceso de confianza nos hace salirnos de los planes marcados para el entrenamiento. Nos sentimos repletos de energía y nos pasamos en la intensidad. Es importante controlar estas situaciones de excesivo entusiasmo y motivación que nos pueden llevar a lesiones.
La prevención de lesiones es un asunto más complejo de lo que parece en un principio. Por ese motivo, es interesante contar con el asesoramiento de un entrenador personal.